Vida Consagrada: Un don para la Iglesia | Custodia Terrae Sanctae

Vida Consagrada: Un don para la Iglesia

«Reproducir en sí mismo, en cuanto es posible, aquella forma de vida que escogió el Hijo de Dios al venir al mundo» (Exhortación Apostólica Postsinodal Vita Consecrata)

"Una invitación que convoca a las diferentes culturas para reflexionar sobre los fundamentos de la identidad de la vida consagrada en la Iglesial y en el mundo y sobre las exigencias formativas en los contextos contemporáneos.”

«La vida consagrada está en el corazón de la Iglesia como elemento decisivo de su misión, en cuanto expresa la naturaleza íntima de la vocación cristiana y la tensión de toda la Iglesia Esposa hacia la unión con el único Esposo”





Carta Apostólica, año de la Vida Consagrada

Este mosaico explica bien la misión de la vida consagrada en la Iglesia. Este año, de hecho, se ha dedicado a la vida consagrada y esto hace que las diócesis de todo el mundo promuevan momentos de encuentro y de reflexión. Por ello, también aquí en Tierra Santa se reunieron del 21 al 23 de abril institutos de vida consagrada y sociedades de vida apostólica de Galilea y Jerusalén.

P. JOSÉ RODRÍGUEZ CARBALLO, ofm
Arzobispo Secretario CIVCSVA
La belleza de la vida consagrada está en la santidad y en el fruto de la santidad. En el logo del Año de la Vida Consagrada hemos querido representar al Espíritu que aletea sobre las aguas. Pero las aguas en este lugar tienen la forma de un mosaico. Queremos representar en este mosaico la belleza de la vida consagrada en la diversidad de los carismas.

Durante el encuentro que tuvo lugar en Jerusalén en el Auditorium del Centro Pontificio Notre Dame, se reunieron unos 500 consagrados de diferentes comunidades religiosas. La mayoría son extranjeros que viven en Tierra Santa desde hace muchos años y que se ponen al servicio de la iglesia local, con todos sus desafíos.

P. JOSÉ RODRÍGUEZ CARBALLO, ofm
Arzobispo Secretario CIVCSVA
”Lo que pide hoy la iglesia es una fidelidad creativa. Fidelidad no quiere decir estar en el mismo lugar, sino donde debemos estar y si debemos caminar, caminamos, siempre siguiendo el soplo del Espíritu.”

Los tres días de encuentros acabaron, en la mañana del 23 de abril, con la celebración de la Santa Misa en el Santo Sepulcro, en el día en el que la Custodia de Tierra Santa celebra sus 800 años. El P. José Rodríguez pidió atención para una vida consagrada apasionada por Cristo, que aquí en el Santo Sepulcro nos dio testimonio de la Resurrección.

Sor AMELIA
Misioneras ecuménicas
"Lo considero siempre un don del Señor el ser llamada a seguirlo de cerca.”

Sor MARTA NAVARRO
Hermana del Sagrado Corazón del Verbo Encarnado
“El mundo necesita testimonios que crean en la resurrección y nosotros con nuestra vida estamos anunciando la resurrección de Cristo. Es posible una vida diferente, una vida en la que la paz y la alegría reinen en el corazón.”

”Las personas consagradas son signo de Dios en los diferentes ámbitos de vida, son levadura para el crecimiento de una sociedad más justa y fraterna, son profecía de intercambio con los pequeños y pobres. Entendida y vivida así, la vida consagrada aparece como realmente es: Un don de Dios, un don de Dios a la Iglesia, un don de Dios a su Pueblo. Cada persona consagrada es un don para el Pueblo de Dios en camino.”