La tarde del sábado 28 de octubre, en el convento franciscano de Tierra Santa en América, en Washington DC (Estados Unidos), tuvo lugar la decimotercera misa anual y cena benéfica en apoyo de la Custodia de Tierra Santa.
Sensibilización
El acto tiene como objetivo sensibilizar al público americano sobre la misión que llevan a cabo los frailes franciscanos de la Custodia de Tierra Santa en la tierra de Jesús, donde desde hace más de ocho siglos custodian los Santos Lugares y cuidan de la comunidad cristiana.
La cita de este año se celebró en un insólito ambiente de tensión debido a los trágicos acontecimientos que sacuden la Tierra Santa. Una vez más, este lugar se ha convertido en escenario de guerras y hostilidades. Sin embargo, el llamamiento de los frailes a la solidaridad tuvo una respuesta significativa, unos 150 asistentes se unieron generosamente a la iniciativa de los franciscanos de Tierra Santa.
En la edición de este año estuvo ausente el Custodio de Tierra Santa, fray Francesco Patton, que permaneció en Jerusalén para expresar su solidaridad con la comunidad cristiana en estas semanas de conflicto. Durante la cena, a través de un vídeo, fray Patton exhortó al público americano a responder a las necesidades cada vez más urgentes a las que se enfrentan los cristianos.
En apoyo a las obras sociales en Belén
Respondiendo a este llamamiento, el convento franciscano lanzó una campaña para ayudar a la asistencia médica y social a las familias cristianas de Belén y de las comunidades circundantes.
El acto también fue una ocasión para rendir homenaje al hospital de la Sagrada Familia de Belén, gestionado por la Orden de Malta, que desde hace décadas desarrolla una valiosa labor social en favor de las familias palestinas. Por el compromiso inagotable de este hospital, que a lo largo del tiempo ha desarrollado una importante colaboración con los franciscanos en apoyo de la comunidad local, la embajadora Michèle B. Bowe, presidenta de la Fundación Hospital de la Sagrada Familia de Belén y embajadora de la Orden de Malta en Palestina, recibió el premio Grato Animo, un galardón concedido por la Custodia de Tierra Santa a quienes han demostrado un apoyo y una generosidad excepcionales hacia la comunidad cristiana de Tierra Santa.
Monasterio Franciscano de Tierra Santa en América
