Continúa la visita del Ministro General fray Massimo Fusarelli a Tierra Santa.
Después del viaje a Galilea y la misa en el Monte Tabor, la mañana del miércoles 17 de abril estuvo dedicada a dos comunidades de Jerusalén, con la visita al Santo Sepulcro y a la Flagelación.
Misa comunitaria en el Santo Sepulcro
A primera hora de la mañana, el Ministro General – invitado por la comunidad – presidió la misa comunitaria ante el Santo Sepulcro, que había visitado por última vez en 2021. Al final de la celebración, el 121º sucesor de San Francisco oró durante un largo rato dentro del Edículo.
Finalmente, el presidente del Santo Sepulcro, fray Stéphane Milovitch, acompañó a fray Fusarelli y a su vicario, fray Ignacio Ceja Jiménez, en su visita fraterna a la comunidad.
La visita del Terra Sancta Museum
Luego, el Ministro se trasladó al monasterio de la Flagelación, donde visitó la sección arqueológica del Terra Sancta Museum: aquí, fray Eugenio Alliata, profesor extraordinario de Arqueología Bíblica del Studium Biblicum Franciscanum, y fray Amedeo Ricco, arqueólogo del SBF, lo guiaron a través de los restos y los valiosos objetos que se conservan en el museo que se encuentra en el corazón de la ciudad vieja de Jerusalén.
Actualmente el museo conserva y pone en valor un raro patrimonio arqueológico y artístico de la cristiandad: un tesoro custodiado por los franciscanos de la Custodia de Tierra Santa durante más de 800 años.
Misa por el centenario del Studium Biblicum
Al final de la visita, junto con los profesores y alumnos del Studium Biblicum Franciscanum, fray Fusarelli celebró una misa en la iglesia de la Flagelación, durante la que se recordó el centenario de su fundación 1924-2024.
«Con gran alegría – comenzó fray Rosario Pierri, decano del Studium Biblicum Franciscanum – estamos aquí, en torno a la mesa del Señor, contigo, padre Massimo: en tu persona no solo vemos al sucesor de San Francisco, sino que también sentimos la cercanía y la solidaridad de nuestra amada Orden. Contigo, hoy recordamos el centenario de la fundación que nos hace reflexionar sobre nuestra historia y nuestra identidad: desde que los frailes desembarcaron aquí en Tierra Santa, no han dejado nunca de buscar recuerdos evangélicos que adquirir y custodiar».
«Gracias por vuestra misión – dijo fray Massimo Fusarelli al final de su homilía – En nombre de la Orden doy las gracias a la Custodia por toda la ayuda que siempre ha dado al Studium Biblicum, que es custodia “viva” de los santos lugares. Os traslado todo mi apoyo por vuestra presencia en estos lugares, a vosotros que estáis aquí y seguís estando junto a los pueblos que siempre han habitado esta tierra, para mostrar dónde Dios colocó su tienda en medio de los hombres. Pidamos al Señor que siempre haya una presencia que pueda realizar esta misión y que se una a esta vocación, que es la vocación de los frailes menores: acoger la Palabra del Evangelio, vivirla, darle carne con nuestra vida y hacer que sea amada».
Silvia Giuliano
