Clausura del año de la Eucaristía en Cafarnaún | Custodia Terrae Sanctae

Clausura del año de la Eucaristía en Cafarnaún

29 Octubre 2005

La Custodia de Tierra Santa, unida a la Iglesia Católica, ha celebrado el año de la eucaristía, y en el ámbito de la liturgia de las peregrinaciones que realiza a lo largo del año, lo ha concluido con una celebración en el Santo Lugar de Cafarnaún, junto a la Sinagoga donde el Señor pronunció su revelación del Pan de Vida. ¨Ego sum panis vitae¨ha sido el lema de la celebración que ha preparado el Oficio Litúrgico de la Custodia de Tierra Santa en colaboración con las parroquias de Nazaret y su coral, Caná de Galilea, la Comunidad franciscana de Cafarnaún y el Seminario franciscano de Jerusalén.

La afluencia de gentes fue satisfactoria, más de quinientas personas: fieles de las parroquias de Nazaret y Caná con sus scouts, Jerusalén, Acre, franciscanos de diversos conventos y religiosos de ambos sexos se congregaron para iniciar la celebración a las cuatro de la tarde.

La celebración de una tarde tranquila y apacible, presidida por el Custodio de Tierra Santa, fray Pierbattista Pizzaballa, se celebró en tres tiempos y lugares. Junto a la sinagoga: La proclamación del Evangelio del Pan de vida en la sucesión de diversas lenguas. La procesión en torno a la Sinagoga y la calle central de las ruinas que condujo al Lago. Y la conclusión a la orilla del lago. Los símbolos que acomapañaron la celebración fueron el Libro de los Evangelios y el cesto de Panes.

Junto a la Sinagoga
El esquema de las liturgias de Peregrinación de que habla Egeria han inspirado la distribución del pasaje evangélico combinándolo con la oración, la lectura y la respuesta salmódica. Se proclamó el Evangelio en tres momentos: Jn 6, 1-15 Dio de comer a cinco mil hombre y se retiró al monte (inglés, italiano) y el salmo 22 (en árabe); Jn 6, 22-40 Explica a la multitud “Yo soy el pan de vida” (árabe) y el salmo 77 (latín); Jn 6, 41-59 Explicación en la Sinagoga de la sangre y del pan de vida eterna (español, francés). Esta primera parte se terminó significándose la asamblea la paz y una vez reforzados los lazos fraternos se cantó el Padre Nuestro.

Procesión
La procesión se dirigió al Lago llevando los símbolos del libro de los Evangelios y el cesto de panes que habrían de ser benedecidos y distribuidos. Como es usual en las peregrinaciones se fue cantando en diversas lenguas: español, árabe e italiano. No faltó el “Tú has venido a la orilla” y otros cantos adecuados al momento.

A la orilla del mar
Llegados a la orilla del Lago el Evangeliario fue colocado sobre el altar y los panes en torno al mismo. El padre Custodio tomó la palabra y explicó con brevedad el significado de la celebración que estábamos realizando.

El Párroco franciscano de Nazareth, P. Maroun Younan habló en árabe.
Seguidamente el padre Custodio bendijo los panes y los distribuyó a los fieles.
Todo terminó festivamente con la animación de los jóvenes cantores dirigidos por el P. Jack Karam pudiendo disfrutar de la presencia viva de la palabra de Cristo.

fr. Enique Bermejo Cabrera