Comida con el Presidente sirio el día de Navidad de 2006 | Custodia Terrae Sanctae

Comida con el Presidente sirio el día de Navidad de 2006

En los días anteriores a Navidad el obispo Luca, del Patriarcado greco ortodoxo, me invita a comer con el Presidente sirio Bashar el día de Navidad, en su Patriarcado. Le digo que es fra Romualdo el representante del obispo, su Vicario para Damasco. Pero él me confirma que habían recibido mi nominación y que, si no, no se realizaría el tradicional intercambio de felicitaciones por parte de los representantes de los oficiales del gobierno, como sucede cada año. Después de haber informado a fra Romualdo, que me anima a ir, llamo a fra Filippo, delegado del Custodio, para advertirle que la ceremonia de las felicitaciones tendrá un desarrollo distinto y que – a menos que quisiera venir para encontrarse con los frailes – podía disponer libremente cuándo venir a vernos.

Después de la santa Misa (a las 10:30 horas) del día de Navidad, y el intercambio de felicitaciones con los parroquianos, me acerco al Patriarcado greco ortodoxo, donde se han reunido los representantes de las diversas iglesias cristianas. Llega también el Nuncio apostólico, Mons. Giovanni Battista Morandini. Estamos en la sala del Sínodo esperando la llegada de todos los invitados: los representantes de las comunidades no cristianas, sunníes, chiíes, drusos e ismaelitas. Nos avisan para acercarnos al Patriarca greco ortodoxo Hazim y al Patriarca siro ortodoxo Zakka (se le ve en la foto junto a Bashar), que ya había saludado al Presidente. Éramos más de cincuenta personas. El Patriarca Hazim le da la bienvenida oficial, con palabras simples y cordiales. Cuando llega su turno, el Muftí hace un discurso bastante largo recordando que Siria es la patria de las tres religiones reveladas. Recuerda la azora de la Virgen, así como un pasaje de un Evangelio apócrifo en el que se habla del profeta que vendría después de Jesús, el profeta Mahoma. El acento se pone en la convivencia pacífica de los miembros pertenecientes a todas las religiones. El presidente Bashar toma la palabra y explica el objetivo de este encuentro: no sólo para intercambiar felicitaciones por las dos fiestas –la Navidad para los cristianos y la del sacrificio para los musulmanes- sino para mostrar al mundo un modelo de convivencia pacífica entre los miembros de las distintas religiones.

La comida se sirve sin retraso, con mucha clase. Se concluye el encuentro con una foto de recuerdo en la escalinata del Patriarcado.

Parece que el encuentro ha sido un paso importante para animar a la población a respetarse y a vivir junto de modo pacífico y en armonía.

fra Joseph COSTANTIN OFM