Entrada solemne del cardenal Christoph Schönborn y de los obispos de la conferencia episcopal austriaca en Jerusalén | Custodia Terrae Sanctae

Entrada solemne del cardenal Christoph Schönborn y de los obispos de la conferencia episcopal austriaca en Jerusalén

08/11/2007

Los Obispos de Austria han estado de visita en Tierra Santa del 4 al 10 de noviembre. Tras tres intensos días en Galilea, llegaron a Jerusalén en la tarde del 7 de noviembre. Siguiendo antiguos ritos y tradiciones, comenzaron su visita con una solemne entrada en la Ciudad Santa por la Puerta de Jafa para llegar a la Basílica del Santo Sepulcro o de la Resurrección.

Al rededor de las 5 de la tarde S.E. el Cardenal Christoph Schönborn llegó a la Puerta de Jafa donde fue recibido por el Vicario de la Custodia, Fray Artemio Vítores, por el Coadjutor del Patriarca Latino, Monseñor Fuad Twal, por el Nuncio Apostólico, S.E. Monseñor Franco y por los Representantes de otras Iglesias.

El Cardenal vino acompañado por los miembros de la Conferencia Episcopal Austriaca: el Arzobispo Alois Kothgasser, (Salzburg); los Obispos, Egon Kapellari (Graz.Seckau), Klaus Küng (St.Pölten), Pau Iby (Eisenstadt), Alois Schwartz (Gurk-Klagenfurt), Ludwig Schwartz (Linz), Manfred Scheuer (Innsbruck), Elmar Fischer (Feldkirch); el Abad Kassian Lauterer (Wettingen-Mehrerau), junto a cinco Obispos sufragáneos y, con ellos, el franciscano, Obispo auxiliar de Graz, Franz Lackner).

Tras los discursos de bienvenida se formó el cortejo que se dirigió procesionalmente, atravesando las estrechas calles de la Antigua Ciudad, hasta la plazoleta del Santo Sepulcro. Abriendo la procesión iban los KAWAS, seguidos de numerosos hermanos franciscanos, religiosos y religiosas de diferentes congregaciones. Mientras al Cardenal y su cortejo se aproximaban a la plazoleta, se abrieron las puertas de la Basílica de la Resurrección, donde le esperaban los tres superiores de las comunidades que son responsables de la Basílica.

Llegados a la Lápida de la Unción, el Cardenal de despojó de la estola y besó la piedra que nos recuerda la unción del cuerpo del Señor al ser bajado de la Cruz. En este lugar, Fray Pierbettista Pizzaballa OFM, Custodio de Tierra Santa, pronunció una alocución de bienvenida en la que subrayó el significado de la visita como signo de unidad entre la Iglesia universal y las Iglesias locales; unidad en la fe en Jesucristo, fuente de amor y de paz. El Cardenal asperjó a los reunidos con el agua bendita ofrecida por el padre Custodio; acompañada por el canto del Te Deum, la procesión continuó hasta el Sepulcro vacío. El Obispo Twal saludó en alemán al ilustre peregrino, subrayando que de esa Tumba vacía, testimonio de la Resurrección, se levanta toda la esperanza del hombre, que incluye la del sufrido pueblo de esta Tierra Santa que, puede ser confortado aquí, en la verdad de la Resurrección. Los Obispos subieron a la capilla del Calvarios para un breve momento de oración. Finalmente, fueron recibidos por el Patriarca Latino.

El Cardenal Schönborn celebró una Misa solemne al día siguiente delante del edículo del Santo Sepulcro.

GG