La «Tau Banda» de Acre ha acompañado las tradicionales felicitaciones navideñas que la embajada de Italia en Tel Aviv dirige a los religiosos. «Esta participación –ha dicho el fundador de la banda, el P. Quirico Calella- quiere ser un acto de agradecimiento a la embajada y a los amigos del embajador que nos han ayudado en la restauración del Tau Musica Center, inaugurado este año en Acre». Nacida hace dos años por iniciativa del P. Calella, la Tau Banda y el Tau Musica Center se están desarrollando gracias a la colaboración entre el Conservatorio de Acre y la escuela local de la Custodia de Tierra Santa, dirigida precisamente por el P. Quirico. La banda –compuesta por jóvenes judíos, cristianos y musulmanes con edades comprendidas entre los 11 y los 15 años y dirigida por el maestro bielorruso Borsi Ekelchik- comienza a darse a conocer en Tierra Santa y en el extranjero, donde ha participado en una sección del Festival del Valle de Itria.
En esta ocasión, la Tau Banda se ha presentado con el nuevo estandarte y divisas personalizadas. El logo representa a un fraile «volando» atado con una cuerda a una {tau} (el símbolo de los franciscanos) que forma una clave musical, circundada por la leyenda «Terra Santa Tau Banda» sobre el fondo de Acre.
La tarde de las felicitaciones comenzó solemnemente con la ejecución del Himno de Tierra Santa –escuchado en pie por todos los presentes- al que siguieron las más conocidas melodías navideñas, ejecutadas con distintos arreglos. El embajador, el Sr. Luigi Mattiolo, el nuncio apostólico, Mons. Antonio Franco, y el vicario patriarcal para Israel, Mons. Giacinto Marcuzzo, pronunciaron posteriormente unas palabras de elogio y agradecimiento.
FRC
En esta ocasión, la Tau Banda se ha presentado con el nuevo estandarte y divisas personalizadas. El logo representa a un fraile «volando» atado con una cuerda a una {tau} (el símbolo de los franciscanos) que forma una clave musical, circundada por la leyenda «Terra Santa Tau Banda» sobre el fondo de Acre.
La tarde de las felicitaciones comenzó solemnemente con la ejecución del Himno de Tierra Santa –escuchado en pie por todos los presentes- al que siguieron las más conocidas melodías navideñas, ejecutadas con distintos arreglos. El embajador, el Sr. Luigi Mattiolo, el nuncio apostólico, Mons. Antonio Franco, y el vicario patriarcal para Israel, Mons. Giacinto Marcuzzo, pronunciaron posteriormente unas palabras de elogio y agradecimiento.
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