Los frailes del convento de San Salvador de Jerusalén se han reunido esta mañana en la Sala del Diván para felicitarse la Navidad mutuamente.
Ha sido un precioso momento de paz e intimidad –como ha subrayado el guardián del convento, fray Artemio Vítores- antes de sumergirse en los frenéticos preparativos de última hora. De hecho, a primera hora de la tarde, los ceremonieros y los frailes que se encargan del servicio litúrgico se acercarán a Belén para organizar las celebraciones.
En su saludo, el padre Pierbattista Pizzaballa, Custodio de Tierra Santa, ha recorrido los intensos momentos vividos por la fraternidad custodial en un año en el que se han sucedido hechos tan importantes como la visita del Papa a Chipre, el Capítulo custodial y el Sínodo sobre el Oriente Medio. Los seminaristas, con sus cantos, han alegrado a la asamblea creando una bella atmósfera navideña. El encuentro ha concluido con felicitaciones y degustación de pasteles.
Fray Riccardo Ceriani
Ha sido un precioso momento de paz e intimidad –como ha subrayado el guardián del convento, fray Artemio Vítores- antes de sumergirse en los frenéticos preparativos de última hora. De hecho, a primera hora de la tarde, los ceremonieros y los frailes que se encargan del servicio litúrgico se acercarán a Belén para organizar las celebraciones.
En su saludo, el padre Pierbattista Pizzaballa, Custodio de Tierra Santa, ha recorrido los intensos momentos vividos por la fraternidad custodial en un año en el que se han sucedido hechos tan importantes como la visita del Papa a Chipre, el Capítulo custodial y el Sínodo sobre el Oriente Medio. Los seminaristas, con sus cantos, han alegrado a la asamblea creando una bella atmósfera navideña. El encuentro ha concluido con felicitaciones y degustación de pasteles.
Fray Riccardo Ceriani