Por iniciativa de la asociación ecuménica Sabeel, los cristianos árabes de Jerusalén se han reunido en la iglesia de San Esteban del convento de los dominicos para rezar juntos por los cristianos de Iraq y por la paz en este país. Al mismo tiempo, la oración ha servido como punto de inicio del tiempo de Navidad.
Por la parte franciscana estaba presente fray Ferz Hejazin, que tiene bajo su cura la parroquia latina de Jerusalén.
Cada uno de los textos elegidos ha sido leído por distintos representantes de las diversas Iglesias, unidas todas ellas por el mismo deseo de paz. La homilía ha corrido a cargo de Monseñor William Shomali, obispo auxiliar de los latinos de Jerusalén.
Al finalizar la homilía, el recogimiento se ha hecho si cabe más intenso cuando la oración ha proseguido a la luz de las velas, en memoria de las víctimas del atentado del 31 de octubre en la catedral de los siríacos católicos y de todos los cristianos asesinados.
El 30 de noviembre tuvo lugar el asesinato de otro cristiano iraquí, ocurrido en la ciudad de Mosul. Este enésimo asesinato eleva a ocho el número de cristianos siríacos asesinados tras la “masacre de Todos los Santos”.
En señal de protesta contra esta ola de violencia contra la minoría cristiana, los representantes de las comunidades cristianas se ha retirado de la conferencia sobre la coexistencia y la tolerancia social, organizada por el Ministeiro iraquí para los Derechos del Hombre. Mientras tanto, los cristianos iraquíes siguen huyendo de su país, haciendo todavía más incierto el futuro de la presencia cristiana en el país de Abrahán, padre de todos los creyentes, en el país evangelizado por santo Tomás.
Mab
Por la parte franciscana estaba presente fray Ferz Hejazin, que tiene bajo su cura la parroquia latina de Jerusalén.
Cada uno de los textos elegidos ha sido leído por distintos representantes de las diversas Iglesias, unidas todas ellas por el mismo deseo de paz. La homilía ha corrido a cargo de Monseñor William Shomali, obispo auxiliar de los latinos de Jerusalén.
Al finalizar la homilía, el recogimiento se ha hecho si cabe más intenso cuando la oración ha proseguido a la luz de las velas, en memoria de las víctimas del atentado del 31 de octubre en la catedral de los siríacos católicos y de todos los cristianos asesinados.
El 30 de noviembre tuvo lugar el asesinato de otro cristiano iraquí, ocurrido en la ciudad de Mosul. Este enésimo asesinato eleva a ocho el número de cristianos siríacos asesinados tras la “masacre de Todos los Santos”.
En señal de protesta contra esta ola de violencia contra la minoría cristiana, los representantes de las comunidades cristianas se ha retirado de la conferencia sobre la coexistencia y la tolerancia social, organizada por el Ministeiro iraquí para los Derechos del Hombre. Mientras tanto, los cristianos iraquíes siguen huyendo de su país, haciendo todavía más incierto el futuro de la presencia cristiana en el país de Abrahán, padre de todos los creyentes, en el país evangelizado por santo Tomás.
Mab