Pierbattista Pizzaballa ordenado obispo en Bérgamo | Custodia Terrae Sanctae

Pierbattista Pizzaballa ordenado obispo en Bérgamo

El sábado 10 de septiembre, en una catedral de Bérgamo repleta de fieles, Pierbattista se dirigió por la nave central hacia el altar, donde fue ordenado obispo. A su lado iba el custodio de Tierra Santa, fray Francesco Patton.

Un aire de complicidad parecía unir a los dos hombres, que intercambiaron algunas palabras. La última vez que fueron vistos juntos fue el 6 de junio, con ocasión del ingreso solemne del custodio, fray Francesco Patton, en Jerusalén, un ingreso que marcó también el final del mandato de quien todavía era conocido como fray Pierbattista.

Este último partía de Jerusalén el día siguiente, sin saber todavía que volvería por la puerta grande como administrador apostólico y arzobispo de Verbe, por decisión del Santo Padre, hecha pública el 24 de junio.

El sábado pasado, rodeado de sus padres, los miembros de su familia, numerosos amigos y de una importante delegación de la Custodia de Tierra Santa y del Patriarcado latino, Mons. Pizzaballa fue consagrado obispo por el cardenal Leonardo Sandri, prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales, acompañado del obispo de la ciudad, Mons. Francesco Beschi, del patriarca latino emérito de Jerusalén, Mons. Fuad Twal, y por una treintena de obispos de Italia y de Oriente Medio.

Estaban presentes las autoridades civiles de Bérgamo y del pueblo natal del nuevo obispo, así como también el embajador palestino ante la Santa Sede, Isa Kasisiye. Las autoridades israelíes excusaron su asistencia a causa del sábado.

La celebración fue muy solemne y llena de emoción y oraciones. La Custodia se alegró también al ver al custodio fray Francesco Patton participando en el rito de consagración y colocando sobre el nuevo obispo el evangelio abierto, mientras el cardenal pronunciaba la oración.

Al concluir la celebración, Mons. Pizzaballa tomó la palabra evocando recuerdos personales. Dio las gracias a los numerosos frailes presentes y tuvo palabras afectuosas hacia el custodio fray Francesco. Con gran sorpresa de algunos sacerdotes del Patriarcado, hacia los que se dirigían las cámaras de televisión, Mons. Pizzaballa dirigió también a «sus» sacerdotes y a «su» pueblo algunas palabras en un árabe excelente.

Al día siguiente, numerosos frailes de la Custodia estuvieron presentes en la primera misa del obispo, celebrada en Cologno al Serio, el pueblo natal en fiesta del excustodio.

La vigilia de la ordenación, Mons. Pizzaballa concedió una entrevista, que se puede ver en el sitio de internet de la revista italiana, y, en español, en la versión impresa de Tierra Santa, la revista de los Santos Lugares.
http://www.terrasanta.net/tsx/lang/en/p9531/Pizzaballa-We-Walk-with-Confidence-Guided-by-Faith