Comienza en San Salvador el nuevo año académico | Custodia Terrae Sanctae

Comienza en San Salvador el nuevo año académico

Una celebración para encomendar a Dios el nuevo año académico 2017-2018. Así ha inaugurado la Custodia de Tierra Santa el inicio de las clases en el StudiumBiblicumFranciscanum y en el StudiumTheologicumJerosolimitanum. Comienzan los cursos de la Facultad de Ciencias Bíblicas y Arqueología que tiene su sede en el convento franciscano de la Flagelación en Jerusalén pero forma parte de la Pontificia UniversidadAntonianum de Roma. También el seminario mayor para la formación de los seminaristas en el sacerdocio, el StudiumTheologicumJerosolimitanum, abre de nuevo las puertas de San Salvador a estudiantes de diferentes naciones y continentes.
Para inaugurar este nuevo año académico, el 5 de octubre, en la iglesia de San Salvador de Jerusalén se congregaban casi sesenta sacerdotes, además de frailes, seminaristas, consagrados de diferentes órdenes, laicos de la Custodia y de la parroquia.
En el altar concelebraron todas las autoridades del mundo académico, entre ellos el nuevo decano del SBF, fray Rosario Pierri. Presidía fray Claudio Bottini, decano emérito, que también pronunció la homilía. «Vosotros jóvenes, inmersos en programas de formación que duran años, podéis tener la sensación de perder el tiempo – decía fray Bottini -. No os dejéis tentar: solo el hábito de estudio podrá conferir, junto con la oración, consistencia y significado a la misión a la que aspiráis. También Jesús, antes de comenzar su ministerio, pasó treinta años de silencio en Nazaret». Comentando después el evangelio, el decano emérito subrayaba la llamada a los compromisos de la oración y la pobreza. Animaba, por otra parte, a vivir la dimensión misionera, sabiendo que «todo cuanto se pide al discípulo misionero ya lo ha hecho Jesucristo, todo lo que enseña lo ha vivido. Él nos precede siempre en todo».

Fray Rosario tomó la palabra al final de la misa para agradecer a fray Claudio Bottini y fray MassimoPazzini, decanos eméritos, y felicitar al nuevo presidente del Estudio salesiano Ratisbone, que se hallaba presente. «Es motivo de alegría encontrarnos aquí reunidos para dar las gracias por todos los dones que Dios nos concede y que nos permitirá que nos falten en el año académico que hemos inaugurado hoy», decía fray Pierri.
Participaron en la celebración también los alumnos del Estudio salesiano y los Misioneros de África de la iglesia de Santa Ana. Órdenes diferentes, países de origen distintos, pero unidos en la oración y en los cantos acompañados por la guitarra.
Tras la bendición se reunieron para un refresco fraterno en el patio de la curia custodial.
«Empiezo el nuevo curso con mucho entusiasmo. Estudiaré teología y es importante, ya que me siento llamado al sacerdocio – decía fray Paolo, un joven estudiante brasileño -. Poco a poco tendré que unir los compromisos del estudio con los de la pastoral». El fraile ya ha terminado su año de estudio de la lengua árabe y espera, por tanto, ponerse al servicio de los parroquianos de Jerusalén. Emmanuel, otro joven fraile, explicaba que será un curso en el que conocerá personas nuevas: «También este año seremos muchos en el seminario, más que el año pasado. Somos 35 seminaristas y procedemos de muchos países. Además, también hay laicos y personas externas». Entre las asignaturas que le gustan más están las relacionadas con algo fundamental para la vida de todos los cristianos: la Sagrada Escritura.

Beatrice Guarrera